Educar Consumidores
Con un total de 21 firmas de parlamentarios de ocho partidos políticos, se presentó por tercera vez en el país, ante el legislativo, un proyecto de ley que busca agravar en un 20% las bebidas azucaradas. El objetivo principal de esta medida es reducir la malnutrición en Colombia a través de mejores hábitos de consumo, disminuyendo la ingesta de bebidas que se relacionan con la aparición de la obesidad.
Es necesario que Colombia adopte medidas contundentes para evitar los casos de obesidad en el país.
OMS
Organismos internacionales como la Organización Mundial de la Salud recomiendan este impuesto para enfrentar la pandemia de la obesidad en el mundo “El menor consumo de bebidas azucaradas implica una reducción de la ingesta de «azúcares libres» y de la ingesta calórica total, una mejor nutrición y una disminución en el número de personas que presentan sobrepeso, obesidad, diabetes y caries dental”.
En la rueda de prensa de la radicación de proyecto, donde estuvieron los parlamentarios León Fredy Muñoz, Armando Benedetti, Juan Luis Castro, David Racero y Julián Peinado, se habló sobre la importancia de esta medida de salud pública “Colombia tiene un problema grave con su sistema de salud, se basa mucho en la curación y en los procedimientos después de que aparecen las enfermedades en los pacientes, y esto no es sostenible en el tiempo. Este proyecto es una medida para prevenir la base de las enfermedades crónicas no transmisibles, como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, etc. asociadas al excesivo consumo de azúcar”, manifestó Juan Luis Castro en su intervención.
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Rubén Orjuela, nutricionista e investigador de Educar Consumidores, es uno de los voceros de esta propuesta y explica el por qué del respaldo de la sociedad civil a este impuesto saludables “Hoy en día las bebidas azucaradas y productos comestibles ultraprocesados son un indicador de las malas dietas, entre más consumen las personas este tipo de productos podría decirse que tiene una dieta cada vez peor, que podría ocasionarles problemas de salud, a corto, mediano y largo plazo”.
Otra de las ventajas del proyecto de ley es el importante recaudo que se obtendría de este impuesto para financiar el sistema de salud. Por otra parte también representaría un ahorro al Estado, ya que serían menos los gastos en pacientes con enfermedades relacionadas a la alimentación, que en el 2016 representaron según el Ministerio de Salud, un costo de 25 billones de pesos.
Descargue aquí el ABC del impuesto saludable a bebidas azucaradas.