El abordaje que hacemos desde Educar Consumidores es interdisciplinario, analizamos casos de afectación a derechos humanos fundamentales y si se relacionan con el consumo de bienes o servicios, emprendemos acciones en busca de la protección para ambas clases de derechos. Desde Educar Consumidores identificamos en los derechos de las y los consumidores una herramienta para promover la eficacia de los derechos humanos fundamentales que se relacionan con el consumo, en particular los derechos a la salud, la alimentación adecuada y el ambiente sano. 

Llevamos a cabo investigaciones, realizamos talleres y jornadas de capacitación, incidimos ante decisores nacionales y locales, promovemos la movilización social y emprendemos acciones jurídicas en busca del respeto y la garantía de los derechos de los consumidores y los derechos fundamentales que se relacionan con el consumo. 

Como ejemplo de las acciones jurídicas resaltamos las quejas que hemos iniciado contra bebidas azucaradas que afectan la salud y que además gracias a análisis de laboratorio que realizamos, pudimos constatar que los productores no declaran en la etiqueta el contenido real de las mismas. Estas quejas las interpusimos ante el INVIMA y la SIC (Superintendencia de Industria y Comercio). 

Otra acción que generó un precedente positivo fue la acción de tutela que interpusimos con ocasión de la censura a una campaña informativa que promovíamos en Educar Consumidores, en el año 2016 iniciamos una amplia campaña de información sobre los efectos nocivos de consumir bebidas azucaradas, la cual, además de contar con la realización de foros y talleres también tenía piezas comunicativas publicadas en medios de comunicación masiva y redes sociales; al cabo de un mes de haber lanzado la campaña en medios, la SIC nos prohibió difundir cualquier tipo de información relacionada con el consumo de bebidas azucaradas y nos ordenó cesar la difusión de las cuñas radiales y el anuncio televisivo que habíamos puesto al aire. 

Ante la evidente censura de nuestra campaña que se denominaba “Cuida Tu Vida Tómala en Serio” y la violación a los derechos fundamentales a la libertad de expresión, el derecho a informar y el debido proceso, presentamos una acción de tutela que al ser revisada por la Corte Constitucional de Colombia fue acumulada junto con otra acción de tutela que habían interpuesto varias personas y organizaciones pertenecientes a la Alianza por la Salud Alimentaria – Colombia, con el liderazgo de la organización Dejusticia, que sintieron vulnerado su derechos a acceder a la información cuando la SIC impidió que “Cuida Tu Vida Tómala en Serio” siguiera al aire. 

Fruto del análisis jurídico llevado a cabo por la Corte Constitucional sobre estas dos acciones de tutela, la Corte profirió la Sentencia T-543 de 2017, ordenando a la SIC levantar la censura en nuestra contra, tutelando los derechos a la libertad de expresión, el derecho a informar y el debido proceso de Educar Consumidores y protegiendo a la vez el derecho a acceder a la información en cabeza de los consumidores. La Corte explicó en esta sentencia el valor preponderante que tiene la libertad de expresión para mantener la democracia en cualquier Estado, recalcó que la población y en este caso los consumidores tenemos derecho a acceder a información y máximo cuando esa información se relaciona con productos que pueden afectar la salud.   

Reflexión final
Independientemente del modelo económico bajo el cual estemos, todas las personas somos consumidoras de bienes o servicios, si bien es cierto, el Derecho del Consumo y la propuesta internacional (de Naciones Unidas) sobre los derechos de los consumidores surgen dentro del modelo capitalista que tiene como uno de los eslabones más importantes de la cadena de comercio a los consumidores, también es cierto que a pesar de que en aras de la equidad y la justicia social sería ideal que estuviéramos bajo los parámetros de un modelo económico distinto, en ese modelo distinto también habría consumidores y consumidoras. 

La importancia de reivindicar estos derechos radica en la facilidad de darle soluciones a problemáticas que se presentan para las personas en múltiples campos (alimentación, salud, ambiente, transporte, comunicaciones entre otros) pero que tienen en común la característica de que esas personas en cuanto a ciertos bienes y servicios, son consumidoras y en ocasiones puede ser más ágil la defensa de sus derechos desde esta faceta.

Desde Educar Consumidores consideramos también que el empoderamiento de los consumidores y consumidoras, convirtiéndonos en consumidores responsables con el entorno nos permite promover un mundo sostenible, a través del consumo consciente podemos promover también el cuidado del ambiente y con ello, el cuidado de la vida humana.